Maria Isabel Robledo
En la escuela primaria, fue la cantora de cada acto o fecha patria que aconteciera. A sus 12 años, convenció a sus padres para comenzar a aprender a tocar la guitarra.
Al pasar el tiempo, empezó a ocuparse de su voz practicando la vocalización, manejando la respiración y la contención de las cuerdas vocales para no dañarlas. Escribe letras y canta, que son sus dos pasiones.
En 1996, grabó su primer disco, titulado “Corazón hechicero”, que se vendió en todo el país. Amante del folklore cuyano y de la música argentina en general, ahora, sus ganas e ímpetu que la caracterizan, pretenden invadir los estudios de grabación para conocer sus virtudes, en el marco de este nuevo proyecto en su vida, que propone el Gobierno de San Luis.
